Los baños de florecimiento son poseedores de propiedades curativas

Los baños de florecimiento -tradición milenaria practicada por los antiguos cristianos- posee propiedades curativas y medicinales que abarcan la trilogía cuerpo, alma y espíritu.

En el aspecto físico las hierbas que son el componen de un baño tienen efectos medicinales que desinflaman y desintoxican nuestros órganos. Mentalmente, tienen efectos relajantes sobre el sistema nervioso central, permitiendo mediante sus aromas y/o vapores liberarnos primordialmente del stress.

También hay un aspecto sobre las propiedades del baño de florecimiento que está referido a cualidades misteriosas y mágicas, puesto que muchos conocedores ejercen limpieza del aura cuando el baño se realiza en forma de ritual.

Por la experiencia se puede afirmar que está limpieza del aura es real, lo que se puede comprobar en que luego de su aplicación muchas personas afirman sentirse con una actitud más positiva hacia la vida, y más aún en muchos casos se ha revelado que han atraído la fortuna hacia sí, como si tuvieran un imán que atrae todo lo positivo. Esto último revelaría la limpieza de aura mencionada. Pero debe tenerse en cuenta que un baño cumple su función física/espiritual pero está en manos de las personas avanzar para alcanzar sus objetivos.

Importancia

Los baños de florecimiento son preparados bajo combinaciones con determinadas plantas o esencias las cuales contienen reconocidas propiedades medicinales. Las flores, hojas, tallos y raíces en distintas proporciones y combinaciones se utilizan para preparar esta sustancia que tiene efectos relajantes sobre todos y cada uno de nuestros órganos.

Los rituales con plantas llamados baños de florecimiento o baños de hierbas, descargan a la persona de la energía negativa, sus aromas ingresan al sistema nervioso causando efectos relajantes en las personas, limpiando el aura de malas vibraciones y tonificando también la piel.

Estos baños deben ser combinados con agua caliente o tibia en algunos casos, para que los poros de nuestra piel absorban sus propiedades. Pueden ser preparados y realizados por el interesado, ser bañados por un experto/a -según el caso- en su preparación o sumergirse en una tina donde se tenga una duración mínima aproximada de 15 minutos.

Es muy importante la disposición de la persona a la hora de realizarse el baño, debe estar predispuesta a cambiar el panorama que le afecta, a descargarse de toda negatividad. Un detalle importante en su proceso de aplicación es de preferencia que sea realizado por el sexo opuesto al solicitante, debido a un tema de transferencia energética que permitiría el ser más efectivo en el tiempo.

Por ello, el baño de florecimiento no es sólo un baño para limpiar y desintoxicar el cuerpo y sus órganos de toxinas, sino que es principalmente un preparado que contribuye a estimular espiritualmente a la persona que está en un ciclo de baja energía. Le fortalece el alma enfrentar la adversidad y mantener la calma hasta en la circunstancias más complejas de su vida cotidiana.