Una razón por la cual una persona psíquica debería de evitar el uso de perfumes esta relacionada con la sensibilidad energética y sensorial que caracteriza a este tipo de individuos. Se podría decir que las personas con habilidades psíquicas están altamente conectadas con su entorno a nivel intuitivo, percibiendo vibraciones y energías sutiles que pueden ser fácilmente perturbadas por estímulos externos, como olores fuertes.
En este sentido, el perfume, con su fragancia artificial y química, interfiere en su capacidad de concentración y en la percepción clara de las energías o mensajes psíquicos. Además, que el aroma del perfume crea un «ruido sensorial» que dificulta la conexión con el plano espiritual o con los estados elevados de conciencia necesarios para recibir visiones, impresiones o mensajes intuitivos.
Otra razón es que algunos perfumes, al estar elaborados con ingredientes sintéticos, desequilibra el campo energético de la persona, impidiendo que esta mantenga su aura limpia y receptiva. Se podría decir que los psíquicos deben contar con ambientes neutros y naturales para sintonizar mejor con las vibraciones de otros seres y del universo, por lo que evitar perfumes sería una manera de proteger su capacidad sensorial y su armonía energética.
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